Recuerdas, recuerdas,
los últimos besos, eran grandes y jugosos.
Leves y sutiles.
Guardaban nuestro ímpetu y nuestra ternura.
Llevaban en las comisuras los poros de nuestra piel.
Ruborizada, excitada.
Quebraron los abrazos desmedidos,
contenían el jugo de unas lenguas.
Enlazadas y lascivas.
¿Recuerdas, recuerdas?
No sabíamos que iban a ser los últimos.
Hubieran sido los mismos.
Era como si el mundo se acabara,
cada vez que te besaba.
Espero que él los recuerdes con tanta vehemencia cómo lo hace ella.
ResponderEliminarBesos
Lindos recuerdos.
ResponderEliminarMuchos besos Lola.
Y es que, no es un poco la esencia del beso? Besar como si fuese el último beso.
ResponderEliminarSupongo que pensar que puede ser el último beso, la última caricia, el último momento hace que todo sea mucho más intenso.
ResponderEliminarUn beso, que no el último.
Los besos siempre hay que darlos, como si fueran los último que se tienen...
ResponderEliminarSaludos y buena tarde de sábado.
Son los besos esos dulces caramelos que nos endulzan el alma...
ResponderEliminarPreciosos versos querida Lola!!! preciosas entradas!
Lindos recuerdos pero... un poco pesimistas. También se puede recordar pensando que habrá muchos más.
ResponderEliminarNo son pesimistas, Anónimo, son muy hermosos, unos besos que guardan la esencia del momento sin pensar que ocurrirá en el futuro.
ResponderEliminarPero ..., ante tanta generosidad una segunda vez carece de sentido alguno.
Cuando se siente así, es cosa de dos imagino Trini.
ResponderEliminarAida querida amiga, linda eres tú.
ResponderEliminarJOven, debería ser así siempre, sin duda alguna.
ResponderEliminarY si no se piensa, se debe hacer sentir como el último añil.
ResponderEliminarAntonio, tuve buena tarde de Sábado, procuro que siempre sea así, con o sin besos.
ResponderEliminarLos besos para mi, son donde callo, donde susurro, donde entro y donde salgo. DOnde vivo y me viven ... Eris, querida amiga
ResponderEliminarSi aún los recuerdas es que dejaron en ti trocitos de él.
ResponderEliminarHay tanto besos como estrellas, algunos los compartimos, otros los regalamos y otros... se quedaran guardados en el cajón de los besos.
Besa, besa, besaaaa... siempre.
Abrazo grande, guapa!
Sí, siempre un beso verdadero incluye la promesa de que con él se acabe el mundo, el no va más, en el sentido de que entregamos todo tras su aroma. Me gustaron, me hicieron sentir tus versos.
ResponderEliminarSaludos blogueros
AZAR
ResponderEliminarCualquier roce furtivo
te envía a las fauces de la locura o el odio.
El más ínfimo matiz de luz
te redime del cascajo de la existencia.
Vuelves a ensancharte y todo te salva:
La brisa del atardecer
El rasgueo de una guitarra
Una pluma en el aire
El recuerdo de un rostro
Y sobre todo
El aferrarse a las ilusiones de amor
desesperadamente.
Anuar Iván.